En los sucesivos anticipos de su primer LP, publicados desde el pasado noviembre, hemos ido descubriendo en Amigas! un sorprendente repertorio de habilidades para metabolizar cualquier tipo de padecimiento, transformándolo en energía limpia.
Moldean con habilidad la materia rítmica y melódica del pop clásico. Con habilidad, infunden las dosis precisas de electricidad y, según convenga, sedosos o mordientes tratamiento vocales a los etéreos fondos electrónicos de sus composiciones, inclinándolas de manera inevitable a la condición de himnos.
Reclamaron el derecho a la inacción temporal como remedio contra la confusión en 'Mis movidas'. Admitiendo la parálisis y la furia, transformaron la indefinición en autoafirmación en 'Déjame en paz'. Cuestionaron las 'Nuevas formas de echar de menos'. Examinaron, hasta encontrar la fuerza y las ganas perdidas, el decaimiento extremo del ánimo 'Afonía de alma'. Es evidente que la adversidad despierta el talento de Amigas!, incuestionable que su talento despeja nuestra visión, inspira nuestro deseo, nos predispone al placer.
El próximo 10 de abril publicamos 'Todo importa tanto', la canción que abre y da título al esperadísimo primer elepé de Amigas!, que verá la luz solo dos días después.
Todo importa tanto, álbum y canción, crean ocasiones perfectas para bailar bajo la lluvia. En calma, radiantes, seguras de que el aguacero cesará, de que “al final, las penas igual que vienen se van”.
En este sensacional debut, Amigas! proyectan con insistencia y encanto la idea de superar lo inesperado, reaccionar a la adversidad, que no importe sentiste miserable, que lo que no puedes o no quieres hacer no interfiera con lo que puedes o quieres hacer, que el éxito sea lo que cada una quiera que sea.
Carlos Díaz (Los Planetas, Dellafuente, Colectivo Da Silva, etc.) produce Todo importa tanto, un disco tan vaporoso como mordiente, gracias al perfecto equilibrio entre lo electrónico y lo orgánico. Valiente, liberador y con un singular atractivo, una infrecuente capacidad para pillarnos desprevenidos, sin alardes, en esferas conocidas.
Todo importa tanto, Amigas!.
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